El toque de la Luz Divina trae consigo sabiduría eterna, esa sabiduría que ustedes guardan en sus almas pero muchas veces no quieren escuchar. Ustedes contienen toda la sabiduría que necesitan para vivir en armonía, paz, amor y felicidad cumpliendo las tareas kármicas que les tocan, y sin embargo eligen enterrar esa luz interior y olvidarla. Esa luz interior no es más que el reflejo de esa Luz Mayor, Divina, incorruptible, que todo lo ha creado y todo lo conecta. Al conectarse con su interior estarán conectándose con la Luz Divina, y a la vez con sus millares de hermanos en todos los mundos y con su Padre-Madre.
Pero la Verdad para conectarse con el interior es dejar de aferrarse a aquellas ilusiones terrenales: los sentimientos de enojo, odio, rencor... no son sentimientos que provengan de la Verdad, de la Luz. La Verdad de la Luz, ya sea interna o externa (porque es la misma Luz) es la compasión, la misericordia y el perdón. Así es, la Luz todo lo perdona, porque todo lo comprende, porque al estar conectados verdaderamente, sus hermanos serán ustedes y ustedes sus hermanos, y toda falla que vean en los otros la percibirán como reflejos de sus propias limitaciones. Aprender es elevarse, aprender es dejar atrás lo que no sirve, lo que es falso, aprender es crecer y perdonar honestamente... y el perdonar es lo que los liberará de las ataduras terrnales y los elevará hasta llegar al Sol de la galaxia y al Sol Universal, a la Fuente de toda la Luz, al Padre, a la Madre.
Cada pensamiento de amor, de perdón, de compasión, es luz. Cada pensamiento luminoso es un canal por el que llevarán la luz a sus hermanos. Piensen con amor de todos y especialmente de ustedes mismos. Perdónense y perdonen, y verán como sus faltas serán borradas para nunca más ser mencionadas. El pasado, el presente, el futuro, son ilusiones: todo es un eterno presente interminable. Hasta que no se perdonen, y no perdonen, sus fallas del pasado nunca se irán, porque aunque sus mentes las perciban en el "pasado" están aquí con ustedes y las llevan en sus espaldas dondequiera que van. Perdonense y verán como sus faltas se irán, desaparecerán.
No es necesario sufrir para perdonarse, pero sí es necesario reconocer la falta para poder perdonarla. Por eso, sentirán dolor hasta que puedan ver y comprender lo que han hecho, y una vez que lo vean con claridad y lo recnonozcan concientemente, lo único que deben hacer es perdonarse. No necesitan esperar que un ángel o que el mismo Padre les digamos que están perdonados: el Padre ya los perdonó desde el momento que los creó. Porque ese momento es también ahora, y ustedes pueden elegir ser creados puros hoy, ahora, en este segundo, en este presente.
Recuerden que siempre y para siempre serán amados, y la Luz Divina no es más que los brillantes lazos de amor que nos unen a todos con todos y con el Todo. Donde hay amor hay perdón, y donde hay perdón hay libertad. Deseamos que hoy se vean en el espejo de sus conciencias, sin miedo de ver todas aquellas cosas de las que están arrepentidos desde lo profundo. Cuando las vean digan honestamente: "Me perdono, porque me amo. Me perdono porque Dios me ama".
Jamás crean que Dios los castigará, Dios jamás castiga. Nuestro amadísimo Padre es amoroso más allá de la comprensión que en este momento poseen. Son ustedes mismos quienes se castigan, por aquellas cosas que no se han perdonado. Dios dice que ya es suficiente.
Es hora de iluminarte: perdónate sin culpas, porque eso es lo que quiere tu Padre. Hasta que tú no te ames incondicionalmente, no permitirás que el Amor del Padre llegue a tí como te lo mereces, como Él quiere dártelo: de forma constante, eterna e incondicional. Perdónate, Él sólo te está esperando a tí.
Arcángel Jofiel
Infinitas gracias por publicar esta canalización. Lo he comprendido. Te envío, Marina, mil Bendiciones!!!
ResponderEliminarOfallia Tarrillo
De Lima, Perú.